Natillas de nueces

Estoy súper contenta porque soy el blog de febrero de Nueces de California. ¡Yuju! Y es que a mí los frutos secos en general me encantan, pero las nueces son algo que nunca nunca falta en mi casa: siempre tenemos un cuenco en la cocina con nueces y muchas veces, como postre, simplemente cascamos unas cuantas nueces y a disfrutar. Y además de estar buenísimas, son una fuente muy importante de Omega-3 (que ayuda a regular el colesterol “malo”), son altas en proteínas, en magnesio y en vitamina E y vitaminas del grupo B, entre otras muchas cosas. ¡Así que todos a comer un puñado yo de nueces a diario!

Y para estrenarme como blog del mes he querido hacer una receta con nueces un poco diferente: natillas de nueces. Un postre que queda espectacular, con una textura maravillosa y con un sabor delicioso. Y, además, ¡con ingredientes que seguro que tenemos todos en casa! Y como siempre, os he grabado la receta en vídeo para el canal de YouTube, ¡estoy a tope! Así que no me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• 750 ml de leche
• 150 gramos de nueces
• 4 yemas de huevo
• 125 gramos de azúcar
• 30 gramos de maicena

Lo primero que vamos a hacer es poner en el vaso de la batidora las nueces con aproximadamente la mitad de la leche y trituramos todo, subiendo progresivamente la potencia, hasta que las nueces estén trituradas por completo. No pasa nada si queda algún trozo de nuez un poco más grande: le dará una textura muy rica a nuestras natillas.

Ahora, ponemos en la cazuela donde vayamos a hacer las natillas las yemas y el azúcar y batimos todo unos segundos con unas varillas de mano. Echamos la maicena y volvemos a mezclar. Por último, echamos el resto de la leche y las nueces trituradas con la leche y mezclamos bien, hasta que todo esté totalmente incorporado.

Llevamos la cazuela al fuego y cocinamos la mezcla, a fuego medio y sin parar de mover, hasta que espese. El proceso es bastante rápido, en menos de 10 minutos la mezcla empezará a coger cuerpo. En ese punto, es importante que no dejemos de mover para que la crema no se agarre a la cazuela y cuando esté espesita, retiramos del fuego.

Repartimos las natillas en los cuencos o recipientes de de vayamos a servirlas y esperamos a que se enfríen hasta estar a temperatura ambiente. Después, las guardamos en la nevera para que a la hora de comerlas estén bien fresquitas. ¡Qué aproveche!

Algunos consejos:

• Yo he triturado las nueces con un vaso americano pero podéis hacerlo con una batidora o con un procesador de alimentos. Como os decía, no pasa nada si las teces no quedan totalmente trituradas.
• A más hora de servir nuestras natillas, podemos ponerle por encima unos trocitos de nuez, virutas o fideos de chocolate, canela en polvo... ¡a vuestro gusto!

Estas natillas quedan con un sabor espectacular y sé que, si os gustan las nueces, os vais a chupar los dedos. Sí os animáis a hacerlas, mandadme una foto para que pueda ver lo ricas que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!