CALÇOTS AL HORNO con SALSA PARA CALÇOTS. ¡Receta Muy FÁCIL!

Hace ya un porrón de años que mi hermana vive en Barcelona. En 2001 dejó Bilbao para ir a estudiar enfermería a Barcelona, encontró allí el amor y el resto es historia. He de confesar que echo mucho en falta tenerla más cerca (sobre todo desde que nacieron mis sobrinos), pero tengo la ventaja de tener una casa en Barcelona en la que me reciben con los brazos abiertos cada vez que me puedo escapar unos días.

Y es que Barcelona es de mis ciudades favoritas: a parte de que tengo allí una parte súper importante de mi familia, es una ciudad multicultural en la que encuentras todo lo que necesitas, con un montón de opción es de ocio, playa, restaurantes de la gastronomía que se te antoje... Y como os imaginaréis, he tenido la oportunidad de disfrutar de un montón de calçotadas auténticas, en las que los calçots se han hecho a la brasa, acompañados de salsa para calçots... Y es que son deliciosos, me encantan a más no poder, y a pesar de no tener la opción de poder hacerlos a la brasa en mi casa, desde hace ya tiempo cuando voy en temporada de calçots a Cataluña me traigo unos cuantos para poder cocinarlos en mi casa y disfrutar de esta ricura también en Bilbao. Los cocino en el horno, y a pesar de no tener ese toque especial del fuego y de la brasa quedan también muy ricos y sirven para quitar el antojo. He grabado la receta en vídeo para el canal de YouTube, ¡corred a verla! No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta

Tiempo de preparación: 30 minutos

Tiempo de cocinado: 60 minutos

Tiempo total de elaboración: 1 hora y media

Dificultad: bajo-medio. No es realmente complicado, pero sí es un poco laborioso.

Raciones: 2

Ingredientes

25-30 calçots

200 gramos de frutos secos (yo tengo 125 gramos de almendras y 75 gramos de avellanas)

500-600 gramos de tomates

1 cabeza de ajos

3 carquiñoles (o en su defecto, 3 galletas maría o 1 rebanada de pan tostado)

3 cucharadas de pulpa de ñora

3 cucharadas de vinagre

150-200 ml de aceite de oliva

Sal

Vamos a comenzar con la salsa para calçots. hacemos un corte no muy profundo en forma de cruz en el culo de los tomates y los colocamos en una fuente apta para horno junto con la cabeza de ajos, así tal cual entera. Metemos en el horno y los cocinamos a 200 grados durante 30-40 minutos, hasta que estén bien doradito todo. pasado ese tiempo, sacamos del horno y dejamos reposar un buen rato, hasta que esté templado. Después, pelamos los tomates y sacamos la pulpa de los ajos.

A continuación, vamos a triturar los frutos secos (han de estar tostados; en caso de estar crudos podéis aprovechar y hornearlos unos 10 minutos junto con los tomates y el ajo) junto con 3 cucharadas de aceite de oliva hasta que estén bien triturados, pero no convertidos en una crema, que mantengan algo de textura. Yo lo he hecho en el vaso americano, que es muy sencillito y rápido. Incorporamos los tomates pelados junto con el jugo que han soltado, los ajos asados, la ñora, el vinagre, los carquiñolis (yo he puesto galletas maría) y 150 ml de aceite (reservaremos 50 ml para rectificar la textura después en caso de ser necesario) y trituramos unos segundos hasta que estén todos los ingredientes bien integrados. Probamos por si es necesario rectificar (yo he añadido más vinagre, más ñora y un poco más de sal; si queréis una salsa más ligera añadid el resto de aceite, en mi caso estaba perfecta) y listo. Ya tenemos la salsa para calcots preparada.

Vamos con los calçots. Cuando se hacen a la brasa, de manera tradicional, se cocinan tal cual, sin limpiar, y es a la hora de comer los cuando se quita la capa exterior. en este caso, vamos a cocinarlos ya limpios, así que vamos a proceder a quitarles la capa exterior, que viene más manchada de tierra, el exceso de parte verde de la parte superior y la parte inferior de las raíces (podéis ver este proceso en el vídeo. 

Los colocamos en una bandeja apta para horno y vamos a cocinarlos a 250 grados (horno precalentado) durante 15-18 minutos. Después, sacamos la bandeja del horno, les damos media vuelta a los calcots y los cocinamos 8-10 minutos más a 250 grados, hasta que estén bien doraditos por todos los lados. ¡Y listo! Los serviremos recién hechos, calentitos, y acompañados de la salsa. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Yo he usado almendras y avellanas, pero podéis usar otros frutos secos: piñones, anacardos, semillas de girasol o incluso cacahuetes. Y si queréis podéis mezclar varios sin problema.
• Yo uso pulpa de ñora de la que venden ya envasada, me parece lo más cómodo y lo más rápido, pero si queréis usar ñoras deshidratadas e hidratarlas y sacar la carne vosotros mismos, adelante.
• La salsa está buenísima: yo cuando me pongo suelo hacer más cantidad porque queda genial con todo tipo de verduras, carne, para hacer bocadillos... ¡es un vicio!

Os aseguro que estos calçots así preparados al horno quedan muy ricos. A falta de unas buenas brasas, esta técnica es genial para poder darse el capricho de comer calçots, os lo aseguro. Si os animáis a hacerlos, mandadme una foto para que pueda ver lo ricos que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!