Albóndigas en salsa de pimientos del piquillo

Las albóndigas son, para mí, una de esas recetas que te evocan buenos recuerdos y que, de alguna manera, con solo saborearlas te hacen sentir bien. Ahora a esos platos se les conoce como confort food, pero para mí son las recetas de mi abuelo Pepe. Y estas recetas son doblemente buenas, ya que alegran el paladar y, de alguna manera, nos calientan el alma. 

Y después de esta entradilla, os estaréis preguntando qué clase de receta voy a cocinar. No os asustéis, se trata de unas albóndigas en salsa; se trata de una adaptación de una de las muchas recetas que hacía mi abuelo, así que quedan perfectas y es una receta súper sencilla. De verdad, son muy muy fáciles de hacer (sobre todo si optáis por hacerlas como yo en la olla de cocción lenta) y os aseguro que no podréis parar de mojar pan en la salsa de pimientos del piquillo. Como siempre, os he grabado la receta en vídeo para el canal de YouTube, ¡corred a verla! No me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta

• Tiempo de preparación: 15 minutos
• Tiempo de cocinado: 2 horas
• Tiempo total de elaboración: 2 horas y cuarto
• Nivel de dificultad: muy bajo. Los más complicado es formar las albóndigas, y no tiene ningún misterio.
• Raciones: 4

Ingredientes

• 500 gr de carne picada (la mías es mezcla de ternera y cerdo)
• 100 gramos de pan (preferiblemente del día anterior) o 2 rebanadas de pan de molde
• 150 ml de leche
• 1 huevo
• 2 cucharadas grandes de cebolla caramelizada (opcional). Yo la hago en el microondas, es facilísimo y queda perfecta.
• 2 dientes de ajo
• 250 gr de pimientos del piquillo
• 200 ml de nata para cocinar
• 100 ml de tomate frito
• 1 cucharadita de pimentón
• 1 cucharaditas de hierbas provenzales o perejil picado
• Sal
• Pimienta

Vamos a comenzar preparando las albóndigas. Para ello, ponemos en un bol la carne picada, el pan remojado en la leche y muy bien escurrido, el huevo, la cebolla caramelizada, los dientes de ajo muy muy picaditos, las hierbas provenzales y sal y pimienta al gusto. Vamos a mezclar muy bien estos ingredientes con las manos, hasta que esté todo perfectamente integrado. Después, si tenemos tiempo, a mi me gusta dejar reposar esta mezcla un par de horas en la nevera, pero si no disponéis de tiempo no pasa nada: pasaremos a formar las albóndigas directamente. Para formar las albóndigas, simplemente tenemos que coger porciones de carne y bolearlas con las manos; en caso de que la mezcla se os pegue a las manos, basta con que os humedezcáis ligeramente las manos. 

Una vez tengamos ya las bolas de carne, vamos con la salsa. Ponemos en el vaso de la batidora los pimientos del piquillo escurridos, el tomate frito, la nata, el pimentón y un poco de sal y pimienta. Trituramos todo con la batidora hasta tener una salsa bien fina. 

Vertemos una parte de la salsa en el fondo de la olla lenta y ponemos encima las albóndigas. Terminamos echando el resto de la salsa sobre las mismas. Colocamos la tapa a la olla lenta y cocinamos en alto (HIGH) durante dos horas. Si queréis hacer esta receta de manera tradicional, mi recomendación es que una vez formadas las enharinéis ligeramente y luego las friais en una sartén con un poco de aceite hasta que estén doraditas. después, colocamos las albóndigas junto con la salsa en una cazuela baja y amplia y cocinamos todo junto a fuego suave unos 18-20 minutos. ¡Listo! servimos nuestras albóndigas con unas patatas fritas y a disfrutar. ¡Que aproveche!

 Algunos consejos:

• Yo he usado carne picada mezcla de ternera y cerdo (me parece que así quedan más jugosas), pero podéis usar sólo carne de ternera o de cerdo, o incluso hacer albóndigas de pollo.
• Como os indico en los ingredientes, la cebolla caramelizada es opcional, pero le da un toque extra de sabor y jugosidad a las albóndigas que a mi me encanta.
• En casa nos encanta acompañar las albóndigas con patatas fritas, pero le van también genial un puré de patata o de boniato, un poco de arroz cocido o incluso una buena ensalada variada.

Estas albóndigas quedan de lujo, y ya veis que haciéndolas en la olla lenta el esfuerzo es mínimo... ¡Tenéis que hacerlas porque sé que os van a encantar! Si las preparáis mandadme una foto para que pueda ver lo ricas que os quedan, me hace mucho ilusión que preparéis las recetas del blog. por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube. ¡Hasta la próxima receta!