Manzanas asadas. Reto Alfabeto Dulce

Día 25. Ya sabéis qué toca hoy, ¿verdad? Sí, eso es, El Reto Alfabeto Dulce. He de confesar que este mes he andado como las locas para hacerlo, casi no llego a tiempo. Este mes la letra letrita era la K y el honor de escoger ingrediente ha recaído en las manos de Bea y Marina del blog Corazón de Caramelo. ¿Sabéis qué eligieron? El kirsch, un licor ruso de cereza.

La verdad es que es un ingrediente que da juego, hay cantidad de elaboraciones dulces que llevan licor y desde el principio se me ocurrieron varias opciones. El drama llegó a la hora de encontrarlo, no había en ningún supermercado de mi barrio. Así que, aquí, ante todos, confieso que he hecho un poquitillo de trampa. Pero solo un poquitillo, ¿eh? He sustituído el kirsch por ginjinha, un licor también de cerezas pero portugués. Aceptamos pulpo como animal de compañía, ¿no? Pues entonces no me entretengo más y vamos al lío con estas riquísimas manzanas asadas. Os digo los  ingredientes.

• 4 manzanas
• 4 cucharadas de azúcar moreno
• 1 cucharadita de mantequilla
• 4 cucharadas de kirsch (o ginjinha)
• Dos nueces picaditas
• Un poco de agua

Comenzamos. Cortamos la parte superior de las manzanas como si fuera una especie de tapa o sombrero. Con ayuda de un cuchillo o de un descorazonador quitamos la parte central de las manzanas, procurando no llegar hasta el fondo (os recomiendo hacerlo con el cuchillo que es más sencillo, con el descorazonador casi seguro que rompemos la parte inferior de las manzanas).

Una vez vaciadas, vamos a hacer un corte finito alrededor de cada manzana. Esto es para que, a la hora de hornearlas, queden lo más enteras posible.

Mezclamos en un bol el azúcar, la mantequilla derretida y el licor con una cuchara y añadimos las nueces picaditas. Distribuímos este relleno entre las manzanas y las tapamos con su sombrerito (parece una txapela, ¿verdad?).

Colocamos las manzanas en una fuente y cubrimos el fondo de la misma con un poco de agua; justo el fondo, ¿eh? Con medio dedo es más que suficiente, durante el horneado se va a formar una salsita deliciosa en el fondo de la fuente.

Metemos a media altura en el horno (precalentado a 200 grados con calor arriba y abajo) y horneamos durante 25 minutines o media hora, hasta que veais que la piel de la manzana esté arrugada y estén blanditas. Sacamos del horno y  cuando estén templadas ya podemos hincarles el diente. ¡Riquísimas!

Algunos consejos:

• La mejor variedad de manzana para este postre es la reineta, aunque yo en este caso he usado la pink royal y ha quedado estupenda.
• Podéis sustituir el kirsch (o la ginjinha) por brandy, ron o, si preferís, zumo de naranja.
• Otra opción es sustituir el agua por sidra o zumo de naranja, nos quedará una salsa muy sabrosa.
• A mi me gusta el toque que le dan las nueces al relleno, pero no os cortéis que admite de todo: otros frutos secos, pasas, orejones, frutos rojos... Echadle imaginación y hacedlas a vuestro gusto.

Ya veis que estas manzanas asadas no tienen ningún misterio y además están buenísimas. Además llevan poco azúcar, así que no hay razón para no darnos este rico capricho. Si os animáis a hacerlas, mandadme por favor una foto que sabéis que me hace muchísima ilusión ver lo buenas que os quedan las recetas del blog. Como siempre, aprovecho a recordaros que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter e Instagram, tenéis los enlaces justo aquí a la derecha.