Quesada. Reto Alfabeto Dulce

Hoy vengo con el Reto Alfabeto Dulce. Sí, ya sé que hoy es día 23, pero como el día 25 es Navidad, este mes hemos adelantado dos días el Reto. Y yo encantada, porque estaba deseando enseñaros la receta de hoy, es de esas que nunca falla: es muy sencilla de preparar y, lo más importante, le gusta a todo el mundo. Antes de nada, os diré que el ingrediente estrella de este mes era la ricotta.

Seguro que ya sabéis qué es, pero para los despistados como yo, la ricotta es un producto lácteo proveniente de Italia (aunque su consumo está extendido por todo el mundo) de aspecto, sabor y textura muy similar al queso fresco, y es prácticamente igual que nuestro requesón (¡gracias Wikipedia!). Se puede consumir solo, como si fuera queso de Burgos, o usarlo en elaboraciones tanto saladas como dulces. La receta que os traigo hoy, una quesada deliciosa, la preparo muy a menudo; me pasó la receta mi amiga Salomé y desde que la hice por primera vez,  no paso más de un mes sin hacerla (y comerla, que es lo mejor). Suelo prepararla con queso de Burgos, pero la verdad es que con ricotta ha quedado estupendísima también. Así que no me enrollo más y nos ponemos al lío con el postre de hoy. Os digo los ingredientes y comenzamos.

• 250 gramos de ricotta
• Un vaso (de los de agua) de azúcar
• Un vaso de harina
• Dos vasos de leche
• 3 huevos
• Un yogur natural
• 100 gramos de mantequilla

Vamos al lío. Ponemos en un bol amplió el queso y lo trituramos con la batidora hasta que no queden grumos. Añadimos el yogur y los huevos y batimos bien, ahora ya con las varillas de mano.

Añadimos el azúcar y, a continuación, la leche. Volvemos a batir hasta que se integre todo completamente.

Tamizamos la harina y la echamos en el bol con el resto de ingredientes, y batimos hasta mezclar todo bien. Por último, derretimos la mantequilla en el microondas y la añadimos al bol, mezclando bien para que se distribuya por toda la masa.

Engrasamos bien el molde que vayamos a usar (os recomiendo uno desmontable con las paredes lisas) con una pizca de mantequilla y vertemos la masa. Llevamos al horno (precalentado a 180 grados) y horneamos hasta que la quedada cuaje. El tiempo dependerá del horno, del molde... pero calculad unos 45 o 50 minutos.

Una vez la tarta haya cuajado, apagamos el horno y dejamos la tarta dentro otros 15 minutos. Pasado este tiempo, la sacamos y la dejamos reposar hasta que se enfríe totalmente antes de comerla. ¡Os vais a chupar los dedos!

Algunos consejos:

• Como os he dicho al principio, esta quesada queda también deliciosa si la hacemos con queso fresco de Burgos o requesón.
• Si os gusta la canela, ponedle media cucharadita a la masa, le va estupendamente.
• Podéis servirla tal cual o con un poco de mermelada de fresa, mora... cualquier fruto rojo combina muy bien, así que a vuestro gusto.
• La medida de algunos ingredientes va en vasos. Usad siempre el mismo para todos los ingredientes; el que necesitamos para esta receta es el típico de agua, de unos 250 ml.

Animaros con esta receta, os aseguro que si la hacéis, repetiréis. Queda muy suave y fina, perfecta para desayunar, merendar o para el postre. Os recuerdo que estoy de sorteo en Facebook. Participar es muy sencillo y los regalos están genial, así que ¡mucha suerte! (toda la info está aquí) Y, por último, aunque no menos importante: ¡Feliz Navidad! Disfrutad muchísimo de las fiestas con vuestras familias. ¡Que el Olentzero, el Caga Tió o Papa Noel os traigan muchas cositas!