Rijsttartje, tarta belga de arroz. Reto Reposteras por Europa
Tal y como hacemos todos los días 10 de mes, preparamos las maletas y nos vamos de viaje con el reto Reposteras por Europa que organiza Pili del blog Tothom a la Cuina. Esta vez nuestro destino escogido ha sido Bélgica, y la verdad es que a mí me ha encantado porque he estado allí de vacaciones dos veces. Bruselas, Gante, Brujas, Amberes... un país con cantidad de lugares preciosos que visitar y, como no, un montonazo de platos deliciosos que probar.
Admito que, aunque suene a tópico, de mis vacaciones en Bruselas tengo especial recuerdo de los moules (mejillones) con patatas fritas, el chocolate, los gofres y las cervezas (bueno, quizá de las cervezas me acuerdo algo menos, no sé por qué será...). También probé varias tartas (la mayoría de chocolate, como os imaginaréis), aunque la que más me sorprendió fue una tarta de arroz con leche, de nombre impronunciable, que me encantó y, claro, tenía que hacerla para este reto sí o sí. Después de buscar bastante, la versión que más me ha convencido ha sido la del blog Food and Cook, aunque he cambiado varias cosas de la receta original (por ejemplo, la tarta que yo probé llevaba una base de hojaldre, así que yo la he hecho así, en lugar de usar una masa quebrada). Además, he hecho dos versiones distintas: una tarta grande y pastelitos en versión mini, para todos los gustos. El resultado es una tarta con un relleno súper cremoso y con un sabor a arroz con leche increíble, casi casi mejor que el recuerdo que tenía. Os aseguro que esta tarta es un triunfo seguro, así que os digo ya los ingredientes* que seguro que estáis deseando poneros manos a la masa.
*Con esta cantidad de ingredientes yo he hecho una tarta grande en un molde de 20 centímetros y 5 mini tartitas.
- Una placa de hojaldre
- 850 ml de leche
- 130 gramos de arroz
- 190 gramos de azúcar
- 200 ml de nata para montar (mínimo 35% de materia grasa)
- Un huevo
- 2 yemas de huevo
- Un palo de canela
- La piel de medio limón
- La piel de media naranja
Ponemos 800 ml de leche en un cazo (reservamos los 50 ml restantes) junto con la canela y la ralladura de naranja y limón (procurad que no tengan nada de la parte blanca). Calentamos a fuego medio-alto hasta que la leche rompa a hervir; en ese momento bajamos el fuego un poco, añadimos el arroz y cocinamos durante quince minutos, removiendo cada dos o tres minutos.
Pasado este tiempo, añadimos el azúcar y la nata y cocinamos otros quince o veinte minutos, hasta que el arroz esté blandito. En este momento es importante que removamos casi continuamente: el arroz es muy puñetero y a la que nos despistemos se pega el jodío.
Cuando el arroz esté tierno, retiramos el cazo del fuego y dejamos que se enfríe totalmente. Una vez tengamos el arroz con leche a teperatura ambiente, retiramos la canela y las pieles de naranja y limón y añadimos los 50 ml de leche restantes, el huevo y una yema batidas. Mezclamos bien hasta que se integre todo completamente.
Cubrimos nuestro molde con la masa de hojaldre y, si sobra algo por los bordes, lo cortamos con un cuchillo. Vertemos la crema de arroz sobre el hojaldre y echamos por encima la otra yema de huevo batida. La extendemos un poco con una brocha o con una cuhara (la crema de arroz es bastante líquida y no podemos pintarla bien, se trata simplemente de distribuir por toda la superficie la yema de huevo para que nuestra tarta se dore un poco más en el horno).
Metemos al horno (como siempre, precalentado, a 180 grados con calor arriba y abajo) y la horneamos hasta que se cuaje, unos 40 minutos aproximadamente (ya sabéis que cada horno es un mundo, así que el tiempo puede variar un poco). A partir de la media hora conviene que la vigilemos para que no se queme: si vemos que se dora demasiado la tapamos con un poco de papel film.
Una vez esté la tarta hecha, la sacamos y colocamos el molde sobre una rejilla para que se enfríe. Podemos comerla ya (templada en un auténtico vicio...), o dejarla reposar en el frigo un par de horitas antes de catarla para que coja un poco más de cuerpo.
Para hacer la versión mini, el procedimiento es el mismo: cubrimos los moldes escogidos con la masa de hojaldre, los rellenamos con la crema de arroz y los horneamos; en este caso, necesitaremos menos tiempo, unos 12 o 15 minutos, en función del tamaño de los moldes que usemos. Al igual que hacemos en la versión grande, dejamos enfriar un ratito sobre una rejilla antes de desmoldar. ¡Que aproveche! O, como dirían los belgas, smakelijk!
Algunos consejos:
- Si queréis, podéis preparar el arroz con leche con antelación y guardarlo en la nevera hasta que vayamos a hacer la tarta (yo lo he hecho así: preparé el arroz por la noche y al día siguiente horneé la tarta).
- Como os comentaba en la introducción, yo he puesto la base de hojaldre porque así estaba hecha la que probé en Bruselas, pero también podéis usar masa quebrada comprada o casera (receta aquí).
- Si os apetece, podéis añadir un poco de canela molida a la crema de arroz con leche antes de hornearla, o una cucharadita de esencia de vainilla.
De verdad, esta tarta es deliciosa. La textura es muy muy suave (sobre todo si la comemos tibia) y el sabor es súper rico. Si os gusta el arroz con leche (y seguro que sí, no creo que exista nadie a quien no le guste) esta rijsttartje os va a volver locos. Además, preparando con antelación el arroz con leche, no tardamos nada en hacerla. Vamos, que no tenéis excusa para no hacerla. Cuando os animéis, enviadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda, me hace muchísima ilusión, Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter e Instagram, los enlaces los encontrais justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!
te han quedado estupendos !!
ResponderEliminarbs
Gracias Mary!
EliminarTe han quedado genial Elena, es la propuesta que tenía yo en mente, aunque al final por falta de tiempo me decanté por un clásico: los gofres.
ResponderEliminarFeliz día, besos
Yo hubiera hecho gofres de tener gofrera. El día que me compre una voy a desayunar, comer, merendar y cenar gofres...
Eliminarun besote
Madre mía que aspecto tan maravilloso y jugoso tiene la tarta!!!
ResponderEliminarYo también tengo una tarta de arroz en el blog y no me extraña que la eligieras porque es deliciosa.
Besotes
¡Súper jugosa Ana! Yo también tengo una tarta de arroz, típica de Bilbao, en el blog. Pero los de Bilbao somos tan chulos que nuestro pastel de arroz no lleva arroz... Jajaja!!
EliminarUn besote
Tremenda tarta. Uau. Felicidades.
ResponderEliminarTremenda tarta. Uau. Felicidades.
ResponderEliminar¡Gracias Nerea!
EliminarPor las fotos tiene toda la pinta de estar deliciosa esta tartita!!!!
ResponderEliminar¿Mejillones con patatas fritas? Que cosas... no es que me gusten los mejillones pero lo de acompañarlo de patatas fritas no sé, no lo veo... jejejeje!!!
Felicidades por tu aportación!!! ^_^
Besotes!
Sí, son algo muy típico: moules et frites. Las patatas fritas las sirven como acompañamiento y están buenísimas, hambre me entra sólo de recordarlo...
Eliminarun besote
Me encantan la receta y las fotos. Una delicia. Además no es muy difícil creo... a ver como sale. Besos (como salga mal me voy a tu casa) jajajajaj
ResponderEliminar¡No es nada difícil! Lleva un poco de tiempo, pero es muy sencilla. De todos modos, eres bienvenida si quieres venir a mi casa a catarla...
EliminarUn besote
no se si entro mi comentario o no... en todo caso te repito que se ve muy rico ;D
ResponderEliminar¡Muchas gracias! :-)
EliminarEl nombre se las trae pero el postre se ve delicioso, una aportación exquisita!!un beso
ResponderEliminarQue rica esta tarta, tiene una pinta, besos.
ResponderEliminarQué rica¡ Mira, yo lo probé el postre este cuando estuve, los moules y la cerveza sí jeje. Un besazo de Dulces Helens
ResponderEliminarQué bien te ha quedado, Elena! Seguro que está buenísima, a mí me encanta el arroz con leche, así que me apunto la receta para hacerla sí o sí!! :D Besitos guapa!
ResponderEliminarTe ha quedado estupenda ¡y qué rica estaba ¿verdad?!
ResponderEliminar¡Besos mil!
Cuando hago arroz con leche me suelo pasar y siempre me sobra un montón. Esta tarta es una manera deliciosa de reciclarlo para la próxima vez.
ResponderEliminarUn besito :)
que jugosa se ve Elena, y en bocadito individual lo más aunque el dichoso nombre asusta, jijiii
ResponderEliminarApunto la receta, amé todas las tartas de arroz. Me fascina el arroz con leche, y esta idea esta buenísima, ademas de ver esas fotos lo cremoso y delicioso que se ve . Woowww de maravilla.
ResponderEliminarLa guardo, besos!!
Te ha quedado estupenda! es una tarta deliciosa!
ResponderEliminarGracias por compartir la receta!
Un beso!
Bueno pues decidido: voy a tener que hacerla en casa! Necesito darle un buen mordisco para saber si realmente es igual de buena que la pinta que tiene! :)
ResponderEliminarUn abrazo!
Buenas tardes Elena!! Llego un poquito tarde... espero que me perdones!! que ricura de tarta!! se ve deliciosa y ese corte es tentador!! sin duda ha tenido que ser todo un exito!! Mil besos
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