Tarta mousse de pomelo y frambuesa. Reto Alfabeto Dulce
Ya estoy aquí. Hoy, como todos los días 25, publicamos el Reto Alfabeto Dulce que organiza Ana del blog Cook the Cake. Pero este es un día especial porque hoy damos comienzo a la segunda temporada del reto: después de muchos ingredientes y muchas recetas ricas, hemos acabado con todas las letras del abecedario y Ana ha decidido darle una vuelta de tuerca al reto.
Os cuento: esta segunda temporada, vamos a tener que hacer una receta no con uno, sino con dos ingredientes estrella. La verdad es que yo estoy encantada, sé que va a ser más difícil pero en eso consisten los retos, ¿verdad? Este primer mes nuestros ingredientes elegidos han sido el pomelo y los bizcochos lady finger, esos que tienen una capa de azúcar crujiente por encima.
He de decir que este mes no me ha parecido excesivamente difícil combinar los dos ingredientes: he optado por hacer una tarta tipo mousse súper fresquita de pomelo y frambuesa con los bizochos tanto en el relleno como a modo de decoración. ¡Buenísima! Tiene un sabor muy rico que combina perfectamente la acidez del pomelo con el dulzor de la mermelada de frambuesa, y los bizochos le dan el toque crujiente perfecto. Además no necesitamos horno para hacerla, ¡una maravilla! Así que no me enrollo más, os digo los ingredientes* y nos ponemos a cocinar.
- 200 ml de nata para montar (mínimo 35% de materia grasa)
- 12-15 bizcochos lady finger
- 50 gramos de azúcar
- 4 hojas de gelatina
- 120 gramos de queso philadelphia
- 100 ml de leche
- 125 ml de zumo de pomelo
- La ralladura de un pomelo
- Tres o cuatro cucharadas de mermelada de frambuesa
- Unas fresas (para decorar)
Lo primero que vamos a hacer es poner la gelatina en un bol con agua fría para que se hidrate. Lo siguiente es romper tres o cuatro bizcochos en trozos pequeños (cada bizcocho en cinco o seis pedazos). Ahora, ponemos en un bol amplio la nata, bien fría, y comenzamos a batirla con ayuda de las varillas eléctricas. Cuando esté semi montada, añadimos el azúcar y continuamos batiendo hasta que esté bien firme. Guardamos en la nevera y reservamos unos minutos.
Calentamos la leche unos segundos en el microondas hasta que se temple y añadimos la gelatina hidratada bien escurrida. Removemos hasta pierda temperatura y se disuelva completamente. Ponemos en un bol el queso philadelphia, añadimos la leche con la gelatina y batimos. Añadimos esta crema a la nata montada y mezclamos hasta que se integre compeltamente. Ahora echamos el zumo y la ralladura poco a poco, batiendo suavemente con las varillas. Por último, ponemos los bizcochos troceados.
Vertemos la mitad de la crema en el molde que hayamos escogido (es recomedable que sea desmontable) y repartimos un par cucharada de mermelada de frambuesa por encima. Echamos el resto de la masa y guardamos en la nevera unas horas hasta que nuestra tarta cuaje.
Una vez la nuestra tarta haya cuajado, la desmoldamos y colocamos una hilera de bizcochos por todo el contorno. En mi caso, los he partido por la mitad para que quedaran de la altura de la tarta. Sólo nos queda poner en el centro una cucharada más de mermelada de frambuesa y, a modo de decoración, un par de fresas troceadas. ¡Listo! ¡A comer!
Algunos consejos:
- Para mi gusto, con 50 gramos de azúcar la tarta queda perfecta, pero como el dulzor depende de los gustos (y la acidez de los pomelos puede variar) es recomendable que probar la mezcla antes de verterla al molde. Si os parece que le falta dulzor, añadid un poco de azúcar glass.
- La mermelada de frambuesa combina muy bien con el pomelo, pero podéis usarla de fresa, frutos rojos... Como siempre os digo, lo que tengáis por casa.
- Os recomiendo que probéis esta tarta con pomelo, pero si no os gusta o no tenéis a mano, podéis hacer esta tarta con naranja o mandarina.
- La decoración es totalmente optativa. Hacedla a vuestra manera y a vuestro gusto.
Probad esta tarta, sé que os va a encantar. Es muy fresquita y súper ligera, ideal para terminar una comida familiar o con amigos. Además se puede hacer con antelación y lleva muy poquito tiempo, así que no hay excusa para no prepararla. Cuando la hagáis, enviadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter e Instagram, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!
Una tarta preciosa, si da pena comérsela...aunque seguro que muy muy rica!!
ResponderEliminarBesos.
Deliciosa, súper apetecible y con dos sabores que me encantan.
ResponderEliminarIdeal para la primavera y los calores que se avecinan.
Besotes
¡ Wow ! No tengo palabras ... ¡ espectacular!
ResponderEliminarQué pinta más riiiiicaaa!! :)
ResponderEliminarMenuda preciosidad de tarta,me acabo de enamorar es una monada!
ResponderEliminarbesotes
Fantástica propuesta y muy apropiada para el verano. Me la copio. Besos
ResponderEliminarCon unos días de retraso me acerco a vuestros blogs a visitar las recetas compañeras para el reto Alfabeto dulce. Con esta combinación de ingredientes has conseguido una receta estupenda, además con una presentación muy tentadora. Me imagino el sabor!!! Besos,
ResponderEliminarTiene una pinta tremenda, estoy salivando, solo de imaginármelo. Me encanta, y te ha quedado preciosa!!!
ResponderEliminarBesos!!