Pastissets de cabello de ángel. Reto Reposteras por Europa

Como todos los día 15 de mes, en el reto Reposteras por Europa organizado por Isabel del blog Gotas de Azúcar y Vainilla hacemos las maletas y nos vamos de viaje. Este mes nos vamos muy muy cerquita, nada más y nada menos que a Andorra. La verdad es que, a pesar de la cercanía, no he estado nunca en nuestro país vecino (tiene un poco de delito estando tan cerca, ya lo sé).

Este mes, para variar, me ha tocado investigar sobre la gastronomía de la zona. Desde luego, no sé qué haría sin mi querida Wikipedia... Debido a la cercanía, Andorra comparte muchos platos con España, sobre todo con Cataluña y Aragón. Os confesaré que he tenido bastante dificultad a la hora de encontrar un dulce típico de Andorra: por más que he buscado, no ha habido manera de dar con una receta dulce típica única y exclusivamente de Andorra. A causa de esto, lo que he hecho ha sido preguntar a mi amigo Mikel, que viaja bastante allí, qué tipo de dulces ha degustado en sus visitas. El me contó que cuando va allí siempre le trae a su madre una caja de pastissets rellenos de cabello de ángel, así que me lancé de cabeza a buscar la receta. ¡Todo un acierto haber escogido estos pastissets! Se trata de una especie de empanadillas dulces rellenas de cabello de ángel, con una masa crujiente y con un toque de anís muy muy rico y, a parte de en Andorra, son muy típicas en Cataluña, Valencia y Aragón. ¡Me han encantado! Bueno, no me enrollo más que seguro que queréis poneros ya mismo con la receta. Os digo los ingredientes que vamos a necesitar. 

• 50 ml de anís
• 50 ml de zumo de naranja
• 180 ml de aceite de oliva suave 
• Un huevo
• Una cucharada de azúcar glass
• 500 gramos de harina
• 200 gramos de cabello de ángel
• Azucar para rebozar nuestros pastisset

Ponemos en un bol amplió el anís, el zumo y el aceite. Mezclamos suavemente con unas varillas de mano y añadimos el huevo batido. A continuación añadimos el azúcar glass y la harina.

Mezclamos con una cuchara y, cuando esté todo más o menos integrado, pasamos a amasar con las manos hasta tener una masa lisa y sin grumos (en un minuto está lista, es una masa muy agradecida).

Hacemos bolas de masa de unos 60 gramos de peso (como una bola de Ping pin, más o menos) y las colocamos sobre una lámina de papel de horno o silicona. Cubrimos con un paño y dejamos reposar una hora y media o dos horas (tranquilos, es una masa sin levadura y no necesita levar, así que no pasa nada si el reposo es un poco más corto o más largo).

Cuando la masa haya reposado, las volvemos a bolear suavemente con las manos para dejarlas un poco más redondas. Las colocamos sobre un trozo de papel de horno, las cubrimos con otro y las aplastamos con ayuda de una cazuela (o con el rodillo si preferís, pero así es más rápido y menos costoso) hasta que nos quede un redondel de masa finita de unos 9 o 10 centímetros de diámetro. 

Ponemos una cucharada de cabello de ángel en el cetro de cada círculo de masa, los doblamos sobre sí mismos y sellamos los bordes, dándoles forma de empanadilla. 

Rebozamos la parte de arriba de los pastisset con azúcar y los colocamos sobre una bandeja de horno. Metemos al horno (precalentado a 180 grados con calor arriba y abajo) hasta que la masa esté doradita, unos 20 o 25 minutos más o manos. Cuando los saquemos, volvemos a rebozarlos, esta vez  por arriba y por abajo con un poco más de azúcar y los dejamos sobre una rejilla hasta que terminen de enfriarse. ¡Listo! ¡A disfrutar de nuestros bueniiiiisimos pastissets!

  

Algunos consejos:

• La receta original lleva 100 ml de anís, pero yo he puesto sólo la mitad y el resto lo he sustituido por zumo de naranja. Si os gusta el anís, no os cortéis: no uséis zumo y poned los 100 ml de anís.
• El relleno de cabello de ángel yo lo he comprado hecho (se encuentra muy fácilmente en cualquier supermercado). Otra opción es rellenar los pastissets de crema de boniato o de mermelada.
• Si os gusta la canela, añadid una cucharada al azúcar con el que rebocéis los pastissets.

Os aseguro que no pueden quedar más ricos, son una verdadera delicia. A mi me encantaron y todos los que los probaron quisieron repetir. Además la receta es muy sencilla, con una masa muy manejable, así que no lo dudéis: poneos el delantal y preparadlos porque os van a encantar. Eso sí, cuando los hagáis mandadme una foto para que pueda ver lo ricos que os quedan. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!