Pizza con pesto y queso de cabra. El Asaltablogs

Como cada último domingo de mes, aquí estoy con mi robo a mano armada realizado para el Asaltablogs. Este mes nuestra víctima era Bea, del blog Sweet Cookies by Bea, y he disfrutado mucho cotilleando su cocina y su despensa. Le he dejado todo un poco desordenado, pero vosotros no os chivéis, ¿eh?

El blog de Bea es muy dulce, tiene una montonazo de recetas deliciosas de tartas, galletas, bizcochos... Y yo, que voy al revés del mundo, pues esta vez me he decidido por una receta salada. Se trata de una pizza o tarta salada con una base súper crujiente de hojaldre y cubierta con salsa pesto y queso de cabra. Ya os imaginaréis que es  una combinación deliciosa, y además, al no preparar nosotros la masa, es sencillísima. No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• Una lámina de hojaldre
• Un puñado grande de espinacas (unos 40 gramos)
• Una cucharada de piñones
• Tres cucharadas de queso grana padano rallado 
• Un buen chorro de aceite de oliva virgen extra (60 ml más o menos)
• Un tomate 
• 5 o 6 tomatitos cherry 
• Medio rulo de queso de cabra (60 gramos aproximadamente) 
• Una pizca de sal

Lo primero que vamos a hacer es preparar el pesto. Ponemos en el vaso de la batidora el aceite, el ajo, los piñones y el queso y batimos hasta que nos quede una pasta. Añadimos las espinacas y trituramos de nuevo hasta que nos quede una crema espesa. 

Extendemos la masa de hojaldre sobre un trozo de papel de horno y pinchamos toda la superficie con un tenedor. Cubrimos con la salsa pesto que acabamos de hacer y, a continuación, cortamos en rodajas el rulo de cabra y los tomates. Los tomatitos cherry los cortamos por la mitad o en cuartos. 

Repartimos las rodajas de tomate, de queso y los cherry por toda la superficie del hojaldre, dejando libre medio centímetro de los bordes. Espolvoreado un poco de sal sobre los tomates. 

Metemos en el horno (precalentado a 190 grados con calor arriba y abajo) y horneamos unos 15-20 minutos, haya que veamos que el queso está fundido y los bordes de hojaldre dorados. Sacamos del horno, y, si os gusta, espolvoreamos con un poco de pimienta molida. ¡Listo! ¡A disfrutar de nuestra deliciosa pizza! 

Algunos consejos: 

• En lugar de espinacas podemos usar albahaca (que es con lo que normalmente se hace el pesto) o rúcula. 
• Yo he usado queso grana padano, pero también podéis usar parmesano o pecorino (o mezcla de varios de estos quesos).
• Mi masa de hojaldre era rectangular, podéis usar una redonda sin problema. Además podéis usar hojaldre refrigerado o congelado; eso sí, en el último caso, hay que tener la precaución de sacarlo con un rato de antelación del congelador para poder manipularla.

Esta pizza queda realmente deliciosa: la combinación de sabores es espectacular y la masa queda súper crujiente. Además ya veis que no da nada de trabajo, así que no hay excusa para no prepararla. Eso sí, cuando la hagáis, mandadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!