Mejillones a la crema. Viaje entre Sabores

Como cada día 10, nos toca hacer las maletas para irnos de vacaciones culinarias con el reto Viaje entre Sabores que organiza María Ángeles, del blog Recetas ABC. Este mes nos quedamos bien cerquita: nos vamos a nuestro país vecino, Francia. ¡Por fin un país en el que he estado!

Al norte de Francia he viajado varias veces (queda muy cerca del País Vasco) y también he estado un par de veces en París, así que estoy un poco más puesta en la gastronomía de nuestro país invitado que otras veces. Además, la gastronomía francesa es de las más conocidas a nivel mundial, así que este mes lo he tenido un poco más fácil. Tras mucho pensar, he optado por hacer unos moules a la crème o mejillones a la crema, muy típicos de Francia y de Bélgica. Yo los he probado en ambos países y me encantaron y ya los había hecho varias veces en casa, así que esta es la excusa perfecta para hacerlos de nuevo y disfrutar de este plato tan rico. No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• Un kilo de mejillones 
• Un puerro
• 50 ml de vino blanco 
• 200 ml de nata 
• Tres cucharadas de aceite de oliva 
• Pimienta 
• Unas ramitas de eneldo 

Limpiamos los mejillones quitándoles todas las barbas y las impurezas que tengan en las conchas. Ponemos el aceite en una cazuela y lo ponemos al fuego. Picamos muy finamente la parte blanca del puerro y cuando el aceite esté caliente añadimos el puerro. Cocinamos a fuego medio unos minutos, hasta que el puerro esté bien rehogado.

Añadimos los mejillones y el vino y tapamos la cazuela. Cocinamos dos o tres minutos, hasta que los mejillones se abran. Los retiramos a una fuente (procurando que el puerro se quede en la cazuela) y, si hay alguno que no se he abierto, lo retiramos. 

Añadimos en el cazo la nata y una pizca de pimienta. Cocinamos a fuego medio tres o cuatro minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa espese un poco. Probamos para rectificar de pimienta o de sal (normalmente no es necesario añadir ya que los mejillones aportan bastante sal).

Echamos de nuevo los mejillones a la cazuela y les damos un meneo para que se impregnen bien con la salsa. Añadimos unas ramitas de eneldo y servimos. Unas copas de vino blanco fresquitos y una buena barra de pan para mojar y ¡listo! ¡A disfrutar!

Algunos consejos:

• Para "afrancesar" un poco más la receta podéis sustituir el aceite de oliva por mantequilla (una cucharada colmada). 
• Yo he usado Txakoli, usad el vino blanco que soláis tomar y que os guste. 
• A este plato le va especialmente bien el toque del eneldo, pero si no tenéis no tenéis no os preocupéis, podéis añadir otro tipo de hierba aromática que os guste.

Estos mejillones quedan deliciosos y son una manera original y diferente de comerlos. ¡Seguro que os encantan! Si os animáis a hacerlos, mandadme una foto para que pueda ver lo buenos que os quedan, me hace mucha ilusión que os animéis con las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!