Caracoles en salsa de pimentón con chorizo y bacón

Ya sé que la receta que traigo hoy no es para todos (si no te gustan los caracoles, ¡huye!), pero los amantes de los caracoles sé que me lo vais a agradecer muchísimo, porque queden deliciosos a más n poder y es un poco diferente a las recetas clásicas. Así que si eres fan de los caracoles, coge sitio, toma nota de la receta y ve corriendo a la cocina.

Y es que la receta de hoy es de esas que, siendo súper sencillas y rápidas, quedan de lujo. La salsa, un poco picante, queda espectacular y es el acompañamiento perfecto para los caracoles. Creedme, que hasta aquellos a quienes no les gustan los caracoles querrán mojar pan en ella, ya veréis... Como siempre, os he grabado la receta en vídeo para el canal de YouTube, ¡corred a verla! No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta

• Tiempo de preparación: 5 minutos
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total de elaboración: 30 minutos
• Nivel de dificultad: bajo, es una receta bien sencilla.
• Raciones: 2

Ingredientes

• Medio kilo de caracoles precocidos (yo los compro embotados, pero también se encuentran congelados)
• Una cebolla
• 2 dientes de ajo
• 2 cucharadas de pimentón (dulce, picante o metal y mural)
• 75 gramos de chorizo picadito
• 75 gramos de bacón picadito
• Un vaso de vino blanco (120 ml más o menos)
• 250 ml de caldo de carne o de pollo pollo
• Una o dos guindillas cayena (opcional)
• Sal
• Aceite de oliva

Echamos dos o tres cucharadas de aceite de oliva a una cazuela y, cuando esté caliente, añadimos los trocitos de chorizo y de bacón. Vamos a cocinarlos unos 4 minutos a fuego un poco alto, para que se doren y suelten su grasita en la cazuela. Pasado ese tiempo, retiramos estos embutidos a un plato y en la misma cazuela echamos los ajos y la cebolla, ambas cosas bien picaditas. Echamos sal al gusto, las guindilla cayena (es opcional, pero personalmente el picante a los caracoles les va genial) y sofreímos hasta que la cebolla esté bien blandita, unos 10 minutos a fuego medio.

Echamos el pimentón a la cazuela y rápidamente, para evitar que se queme, añadimos el vino blanco. Movemos bien ambas cosas y notaremos cómo enseguida la mezcla espesa. En ese punto, comenzamos a añadir el caldo a poquitines, moviendo bien, y a medida que la salsa coja cuerpo iremos vertiendo más caldo, hasta que la salsa tenga la textura y el cuerpo que nos guste. Calculad que necesitaremos unos 250 ml de caldo aproximadamente. Cuando esté a nuestro gusto, tapamos la cazuela y dejamos que se cocine a fuego medio durante 5 minutos más

Pasado ese tiempo, pasamos por la batidora para obtener una salsa bien fina: yo he dejado las guindillas, pero si no os gusta el picante y preferís retirarlas, no hay problema. Probamos la salsa por si es necesario rectificar de sal, lavamos los caracoles y los añadimos a la cazuela junto con el jamón y el bacón que hemos cocinado a principio. Cocinamos a fuego suave-medio, con la cazuela tapada, durante 15 minuto más para que los sabores se integren. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Yo soy fan del picante y lo tolero bien, por eso he puesto las dos cayenas y las he dejado en la cazuela a la hora de triturar la salsa. Pero vosotros adaptad siempre el nivel de picante a vuestro gusto.
• Yo he usado caracoles precocidos de bote, pero podéis usar caracoles precocidos congelados sin ningún problema, lo único que tenéis que hacer es descongelarlos previamente tal y como indique el envase (generalmente hay que introducirlos durante un rato en agua caliente). Y, por supuesto, si preferís comprar los caracoles, purgarlos, limpiarlos y cocerlos vosotros mismos, ¡adelante!
• Mi recomendación es que hagáis este plato siempre de un día para otro, realmente los caracoles ganan en sabor y queda un guiso aún más sabroso.
• La calidad del pimentón es, en este caso, vital para que esta salsa quede súper buena, así que aseguraos de usar un pimentón bien sabroso. Y éste puede ser dulce, picante o una mezcla de ambos. 

Creedme cuando os digo que estos caracoles quedan increíbles. Y la salsa es todo un vicio, de esas que piden barras y barras de pan para mojar. Si os animáis a hacerlos, mandadme una foto para que pueda ver lo buenos que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!