Mejillones al estilo griego. Viaje entre Sabores
Ya nos hemos metido de pleno en Septiembre y poco a poco vamos volviendo a la rutina. Y parte de mi rutina es retomar los retos culinarios después del parón estival: hoy, como cada día 10 de mes, aquí llego con mi receta para el reto Viaje entre Sabores que organiza María Ángeles, del blog Recetas ABC.
Nuestro destino esta vez es nada más y nada menos que Grecia. ¡Quién pudiera estar allí ahora mismo! Es uno de mis grandes viajes pendientes, tengo muchísimas ganas de conocer el país, pero por el momento tengo que conformarme con descubrirlo virtualmente. La cocina griega tiene su base en la dieta mediterránea: muchas verduras, arroz, cordero, pescado y abundantes quesos. Ya tengo varias recetas griegas en el blog y esta vez me he lanzado a hacer unos mejillones que están espectaculares. Ajo, tomate, vino blanco, queso feta... ¡imaginaos la maravillosa combinación! Así que no me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.
- Un kilo de mejillones limpios
- Cuatro dientes de ajo
- Dos tomates
- 100 ml de vino blanco
- 100 gramos de queso feta
- Una guindilla (opcional)
- Una cucharadita de orégano seco
- Perejil fresco
- Tres cucharadas de aceite de oliva
Pelamos los ajos y los cortamos en láminas. Los echamos en una cazuela junto con tres cucharadas de aceite y cuando se doren añadimos los dos tomates cortados en dados, el orégano y la guindilla. Rehogamos dos o tres minutos, hasta que los trozos de tomate comiencen a soltar el jugo.
Incorporamos a la cazuela los mejillones y el queso feta en daditos y tapamos la cazuela, hasta que los mejillones se abran al vapor (dos o tres minutos). Servimos los mejillones calientes con la salsa por encima y con un poco de perejil fresco picado. ¡Que aproveche!
Algunos consejos:
- El queso feta es bastante potente de sal, así que no añadáis nada de sal extra porque corremos el riesgo de que los mejillones nos queden salados.
- La guindilla es opcional, pero para mi gusto le va genial a este plato. Podéis usar un trocito de guindilla fresca, una o dos cayenas o copos de chile.
- La receta original llevaba también un poco de limón, pero para mi gusto no era necesario, quedan buenísimos así tal cual.
Esta receta queda espectacular. La salsa es súper sabrosa, con el toque del queso, del tomate y del vino blanco. De verdad, nos ha encantado en casa a más no poder. Si os animáis a hacer esta receta, mandadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!
Con mucho limón para mí!! ;) deliciosa receta, besos!
ResponderEliminarSe me hace agua la boca. Hermosas fotos y excelente receta!
ResponderEliminarEstos mejillones tienen una pinta increíble, tan frescos y bien aderezados. Un beso!!
ResponderEliminarQue pintaza Elena. Eres una especialista de los mariscos, cuando me ponga en serio con los mejillones, de seguros vendre corriendo a ver una de las tantas recetas con mejillones que tienes tan deliciosas. Estos con queso feta y vino, mmmm una delicia.
ResponderEliminarUn abrazo!
Que ricos los mejillones
ResponderEliminarBuenos días, x favor me podrían decir que clase de queso es el feta que no lo conozco, soy de Tenerife Islas Canarias, gracias
ResponderEliminarEs un queso griego, tiene un sabor bastante salado. Yo en la península lo encuentro sin problema en cualquier supermercado, me imagino que allí en supermercados grandes también lo encontrarás...
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