Pan naan (con vídeoreceta). El Pan Perfecto

Día 11 de mes y aquí llego yo con otro reto: hoy tenemos cita con el reto El Pan Perfecto que organiza Marga, del blog Azafranes y Canelas. Esta vez el pan propuesto es pan naan, un pan plano hindú hecho en sartén que está de vicio y es muy sencillito de preparar. Ideal para acompañar un plato con mucha salsa o un hummus bien sabroso, como este tradicional o este de pimientos del piquillo.

Os diré que nunca había hecho pan naan y en este mes se ha convertido en un básico, lo he hecho unas cuantas veces: es muy sencillo de preparar y eso de no tener que encender el horno es un plus. Además aguanta muy tierno de un día para otro, así que en casa nos ha ganado el corazón. ¡Tanto que hasta he grabado la elaboración en vídeo para el canal de YouTube! Como muchas veces a la hora de hacer pan, he consultado al maestro panadero Ibán Yarza, y también como siempre, el resultado es espectacular, ya veréis. Así que no me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• 300 gramos de harina de fuerza
• Un yogur natural (125 gramos)
• 75 ml de agua templada
• 40 ml de aceite de oliva
• 6 gramos de levadura fresca de panadero
• 6 gramos de sal

Lo primero que vamos a hacer es diluir la levadura en el agua templada. Ojo: tiene que estar templada, a temperatura ambiente, lo ideal es que metas el dedo y no la notes ni fría ni caliente. Si el agua está demasiado caliente nos cargamos la levadura y si está fría le costará más activarse. La dejamos reposar 10 minutos.

Pasados esos 10 minutos, en un bol amplio mezclamos la harina y la sal. Añadimos el yogur y el agua  con la levadura y comenzamos a amasar con las manos. A principio de la pegará un poco, pero en cuanto los ingredientes se integren se voverá mucho más manejable.

Cuando los ingredientes estén bien mezclados, seguimos amasando un par de minutos más para que la masa nos quede bien lisa. Formamos una bola, engrasamos con unas gotas de aceite el bol y dejamos reposar la masa en un lugar cálido una hora aproximadamente, hasta que doble de volumen.

Cuando la masa haya levado, la desgasificamos, es decir, la amasamos suavemente para quitarle el gas. Hacemos cuatro o seis bolas de masa (en función de lo grandes que queramos los panes; yo he hecho 6). Redondeamos cada bola de masa, la colocamos sobre un cuadrado de palel sulfurizado, las aplanamos un poco con la mano y después trabajamos con el rodillo para dejar los panes bien finos, de más o menos medio centímetro de grosor. Dejamos reposar otros 20 minutos.

Tras este segundo reposo, toca cocinar los panes naan. Ponemos una sartén al fuego y mientras se calienta pincelamos con unas gotas de aceite uno de los lados de el pan. Cuando la sartén esté bien caliente colocamos el pan con la parte engrasada hacia abajo; pincelamos la otra cara del pan con aceite de oliva y cocinamos cada pan pan cuatro minutos por cada lado. Tendremos que regular la temperatura para que no se nos quemen: necesitamos que se cocinen bien por dentro. Retiramos a un plato y repetimos el proceso con cada pan. Si no vamos a comerlos al momento, los envolvemos en un paño para que se mantengan calientes. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Si preferís usar levadura liofilizada de panadero en lugar de levadura fresca no hay problema: necesitaréis 2 gramos y la elaboración sería la misma. Eso sí, en ningún caso podéis usar levadura de repostería o impulsor tipo Royal.
• Podéis engrasar los panes antes de cocinarlos con mantequilla derretida (la receta original hindú es con mantequilla clarificada ).
• Si queréis, podéis congelar estos panes sin ningún problema y sacarlos del congelador cuando queráis disfrutar de ellos. Si tenéis tostadora, calentadlos un par de minutos para descongelarlos, veréis qué buenos.
• A la hora de hacer este tipo de masas, a veces una imagen vale más que mil palabras, así que os recomiendo que os paséis por mi canal de YouTube a ver el vídeo con la elaboración paso a paso.

Este pan es muy facilito de hacer y queda de maravilla: tierno, sabroso y con un sabor muy rico. Además no es necesario encender el horno, así que no hay excusas para no prepararlo. Si lo hacéis, mandadme una foto para que pueda ver lo rico que os queda, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!