Patatas gratinadas con bacón. Cooking the Chef

¡Cuántas alegrías nos dan las patatas! Son un ingrediente humilde, económico, que no falta nunca en la gran mayoría de los hogares y te salvan una comida en un pis pas. Desde luego, yo no sé qué haría muchas veces sin ellas... Además, están ricas aunque sea simplemente cocidas o al vapor, así que cuando les damos un plus y las cocinamos de una manera un poco más "sofisticada", ya son la bomba.

No me digáis que no: no en vano eran el ingrediente predilecto del mismísimo Joël Robuchon (1945-2018), nombrado como chef del siglo y el restaurador con más estrellas Michelin del mundo (casi nada, ¿eh?) Y este mes Robuchon es el chef invitado al reto Cooking the Chef, un humilde homanaje por nuestra parte a este gran genio de los fogones. A pesar de la cantidad de libros escritos por Robuchon, os diré que me ha sido imposible hacerme con algún ejemplar en las bibliotecas de mi comunidad, y en Google tampoco he encontrado demasiadas recetas, aparte de su famosísimo puré de patata, mundialmente archiconocido. Y es que Robuchon era famoso por hacer platos increíbles ensalzando ingredientes humildes; incluso publicó un libro con las mejores 100 recetas francesas con patatas. ¡Qué pena no haber podido encontrarlo!

Y hoy vengo con una de estas recetas maravillosas con patatas que, sin complicarnos mucho y con poquitos ingredientes, nos marcamos un plato de 10. Se trata de unas patatas gratinadas con bacón que se prepararan muy rápido y quedan espectaculares, ideales para acompañar un plato de carne o pescado o como entrante. ¡Una maravilla! Así que no me enrollo más, os dijo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• Dos patatas 
• Una cebolla pequeña 
• 50 gramos de bacón 
• 200 ml de nata para montar (mínimo 35% de materia grasa)
• 50 ml de leche 
• 50 gramos de queso parmesano 
• Una cucharadita de mantequilla 
• Una cucharada de aceite de oliva 
• Sal 
• Pimienta 

Lo primero que vamos a hacer, es cocernlas patatas en agua con un poco de sal hasta que estén tiernas y las podamos pinchar con un tenedor sin notar resistencia. Sacamos del agua. 

Mientras las patatas se cuecen, pelamos la cebolla y la picamos finamente. Ponemos el aceite en una sartén y, cuando estén caliente, añadimos la cebolla. Echamos una pizca de sal y dejamos que se poche unos minutos. Añadimos el bacón y cocinamos dos minutos más, hasta que el bacón se dore ligeramente. Retiramos el fuego. 

Pelamos las patatas y las cortamos en láminas finas. Las colocamos en una cazuela o fuente grande o cazuelitas individuales (como he optado yo) y repartirnos por encima el bacón rehogado con la cebolla. 

Ponemos en un bol la nata, la leche, una pizca de sal y de pimienta y mezclamos bien. Rallamos el queso y lo añadimos. Volvemos a mezclar bien y repartimos la mezcla sobre las dos cazuelitas. Echamos unos pellizcos de mantequilla sobre cada cazuelitas y las metemos en el horno a 200 grados (con calor arriba y abajo) durante 12 minutines. Terminamos con un golpe de grill para que adquiera un bonito color dorado. ¡Que aproveche!

Algunos consejos: 

• Podemos poner las patatas crudas, pero en ese caso necesitaremos tenerlas más tiempo en el horno. Yo suelo optar por hacerlo con las patatas cocidas porque puedo tenerlas con antelación  y hacer el gratén en el último momento; y porque de esa manera no tengo que tener tanto tiempo encendido el horno. 
• Os recomiendo usar una variedad de patata específica para cocer. 
• Si no tenéis parmesano, usad un queso de buena calidad que os guste. 

Ya veis que estas patatas gratinadas son muy sencillas de hacer y os aseguro que quedan deliciosas. Sí, de dieta desde luego no son, pero un día es un día y de vez en cuando viene bien darse el gustazo. Si las hacéis, mandadme una foto para que pueda ver lo buenas que os quedan, me hace mucha ilusión que os animéis con las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!