Arroz al horno (con vídeoreceta). El Asaltablogs

Estamos a último domingo de mes y ya sabéis que hoy tenemos nuestra cita puntual con el reto Asaltablogs que organiza nuestra jefa de ladrones Marga, del blog Azafranes y Canelas. Después de tantos años participando, ya sabéis que en este reto nos lanzamos a atracar de manera despiadada la despensa y la cocina de nuestro blog asaltado. Esta vez, el honor de sufrir nuestros robos y demás perrerías ha recaído en Eva, del blog Eva en Pruebas.

Eva es una de las personas que lleva desde los comienzos en este reto y que está siempre dándolo todo mes a mes. Se merecía ser asaltada y nos lo ha hecho pasar genial este mes en el grupo de Facebook a base de canciones y guardianes. ¡Lo hemos pasado pipa! Gracias Eva por ser una asaltada tan entregada, así da gusto entrar a asaltar y robar. Lo peor de este mes ha sido que me ha resultado bastante complicado quedarme con sólo una receta del blog de Eva, había un montón que me gustaban (y que antes o después, en cuanto se despiste, le robaré...). 

Finalmente, he optado por un arroz al horno, típico de Valencia (Eva es de Denia así que sabía que la receta no iba a fallar...). Y de verdad que he quedado encantada: reconozco que no tengo mano con los arroces secos pero este arroz ha quedado de lujo las dos veces que lo he hecho, perfecto de punto las dos ocasiones. Tanto es así que creo que, a partir de ahora, voy a a adaptar mis recetas de arroz para cocinarlas al horno. ¡Mil millones de gracias Eva! Tanto tantísimo me ha gustado la receta que he grabado la elaboración en vídeo para mi canal de YouTube, ¡pasaos a verlo porque os va a encantar! No me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• 250 gramos de arroz redondo
• 500 ml de caldo de cocido (o de carne o pollo)
• 400 gramos de costilla troceada
• 2 morcillas pequeñas (o una grande)
• 100 gramos de garbanzos cocidos
• Una patata
• Un tomate
• Una cabeza de ajos
• Un sobre de azafrán molido (o 6/8 hebras)
• Sal
• Aceite de oliva

Antes de nada, os cuento que este arroz, tradicionalmente se hace en cazuela de barro, pero si no disponéis de ella (o es pequeña, como me ocurre a mí) podemos usar una cazuela baja o paellera, o incluso un recipiente de pyrex, pero siempre teniendo en cuenta que sea apto para horno. Aclarado este detalle, empezamos: ponemos dos o tres cucharadas de aceite en una sartén o cazuela amplia baja (yo he usado la misma cazuela donde voy a hornear el arroz) y doramos bien las costillas. Cuando hayan código color, las retiramos a un plato.

En esa misma cazuela ponemos la patata (previamente pelada y cortada en rodajas un poquito gruesas), el tomate también cortado en rodajas y la cabeza de ajos entera. El tomate vamos a cocinarlo muy poco, justo vuelta y vuelta, y lo retiramos a un plato. La patata y la cabeza de ajos vamos a cocinarlas un par de minutos por cada lado, hasta que cojan un bonito color dorado. Los retiramos también de la cazuela

Ahora echamos en la cazuela el arroz (si es necesario podemos añadir una cucharada más de aceite) y vamos a cocinarlo sin parar de mover dos o tres minutos, hasta que esté nacarado; es decir hasta que empiece a ponerse transparente. Añadimos el azafrán y los garbanzos cocidos y cocinamos todo junto un minuto más.

Volvemos a poner la carne en la cazuela y la repartimos bien. Bajamos el fuego casi al mínimo y comenzamos a disponer todos los elementos de nuestro arroz: colocamos la cabeza de ajos en el centro y repartimos la patata, el tomate y las morcillas (yo las he cortado por la mitad). Terminamos echando el caldo que tendremos bien caliente por encima y una pizquita de sal.

Metemos la cazuela al horno (precalentado a 200 grados con calor arriba y abajo) y horneamos nuestro arroz durante 20 minutos. Pasado ese tiempo, sacamos la cazuela del horno y dejamos reposar el arroz unos minutines antes de servirlo y disfrutar de él. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Es importante que el caldo, a la hora de añadirlo a la cazuela, esté muy caliente, prácticamente hirviendo. De esta manera, en cuanto lo metamos al horno comenzará a cocinarse el arroz.
• Yo he usado morcillas pequeñas y a la hora de ponerlas en la cazuela las he cortado por la mitad. Si queréis, podéis usar una morcilla grande y añadirla cortada en rodajas.

Esta receta queda increíble: el arroz sueltísimo, en su punto perfecto y con un sabor delicioso. De verdad, animaos a prepararlo porque sé que os va a encantar. Si lo hacéis, mandadme una foto para que pueda ver lo rico que os queda, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!