Panecillos de yogur con semillas y pipas {sin amasado ni reposo} con vídeoreceta. El Pan Perfecto

Estamos a día 11, y ya sabéis que hoy tenemos nuestra cita mensual con el reto El Pan Perfecto, que organiza mi gran amiga Marga del blog Azafranes y Canelas. Ya sabéis que cada mes Marga nos propone un pan diferente, y este mes nos ha dado dos opciones entre las que elegir: un pan libre en panificadora o un pan sin amasado. La verdad es que no me ha costado nada qué opción escoger, más que nada porque no tengo panificadora, jejeje.

Me encanta hacer pan, me parece súper gratificante amasar y hornear tu propio pan (y mucho más aún comértelo después). A veces da pereza  porque pensamos que es un proceso laborioso y largo,  y realmente se pueden preparar panes deliciosos con cero esfuerzo, sin tirarse horas amasando ni tener que esperar a que la masa leve. Tenéis ya varios ejemplos en el blog, como este pan son amasado ni reposo en bolsa o este irish soda bread, y hoy os traigo unos panecillos de yogur con semillas y pipas que están espectacular de ricos. Sin amasado, sin reposo y listos en poco más de media hora, una auténtica maravilla. Y como no podía ser de otra manera, os he grabado la elaboración en vídeo para el canal de YouTube, ¡todos corriendo a verlo y a darle al like!. No me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

• 300 gramos de harina
• 50 gramos de harina integral
• Un sobre de levadura tipo royal (16 gramos)
• 300 gramos de yogur griego natural
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• Una cucharadita de sal
• Dos o tres cucharadas de leche
• Dos cucharadas de pipas de girasol
• Dos cucharadas de semillas de amapola
• Dos cucharadas de papas de calabaza

Ponemos todos los ingredientes excepto la leche en un bol grande. Comenzamos a mezclar todo con un tenedor, y cuando esté semi integrado pasamos a trabajar con las manos, hasta que la masa esté lisa y podamos formar una bola. Tranquilos, os aseguro que es una masa muy manejable y en dos o tres minutos está lista.

Cuando la masa esté preparada, la dividimos en seis u ocho bolas del mismo tamaño, en función de cómo de grandes queramos nuestros panecillos. Yo he preferido hacer solamente seis. Cogemos cada una de las bolas y las trabajamos un poco para darles la forma ligeramente ovalada característica de los panecillos. Después, con ayuda de una brocha o de un pincel de cocina pintamos uno de los lados con la leche reservada y apoyamos esa parte húmeda en un plato en el que tendremos extendidas las semillas.

Colocamos los panecillos con las semillas hacia arriba en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado y les hacemos dos o tres cortes con ayuda de un cúter o de un cuchillo afilado. Repetimos este proceso con todos los panecillos. Por cierto, yo he usado semillas de amapola y pipas de girasol y calabaza y he hecho dos panecillos de cada, pero podéis usar la semilla son las pipas que queráis.

Mientras damos forma a los panecillos y los cubrimos con las semillas, vamos pre calentando el horno a 200° con calor arriba y abajo para que cuando terminemos este proceso podamos meter la bandeja. Horneamos nuestros panecillos durante 20 o 22 minutos, hasta que estén doraditos. El resultado es unos panes súper esponjosos, tiernos, con una corteza crujiente y un sabor espectacular. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• En la receta original no usan semillas ni pipas, pero a mi parecer le dan un punto genial. Yo he usado, como so digo, esa semillas y pipas, pero podéis usar las que más os gusten o tangáis por casa. Semillas de lino, sésamo, chía... ¡imaginación al poder!
• Todas las veces que he hecho esta receta he usado yogur griego, pero seguro que queda igual de bien usando cualquier otro tipo de yogur (eso sí, que sea natural).

Esta receta queda muy muy buena, los panecillos quedan con una miga muy tierna y esponjosa y una corteza crujiente. Si os animáis a hacerlos, mandadme una foto para que pueda ver lo ricos que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!