Carrilleras con salsa de tomate (en CrockPot y de manera tradicional). Asaltablogs Im-Previsible

Aquí llego rauda y veloz con otra receta para el reto Asaltablogs Im-previsible que organiza Marga, nuestra jefa de ladrones. Ya sabéis que el mecanismo de este Asaltablogs veraniego es muy sencillo: podemos robar todas las recetas de todos los blogs que queramos. ¡Anarquía!

Hoy vengo con la receta que le he robado a Kety, del blog CroketyPot. Kety tiene un montonazo de recetas en olla lenta y, como no podía ser de otra manera, yo me he lanzado a por una de esas recetas, que ya sabéis que la crockpot me tiene enamorada. He mangado unas carrilleras en salsa de tomate que están de muerte lenta, una verdadera delicia. Pero si no tenéis olla lenta que no cunda el pánico: os explico también cómo prepararlas de manera tradicional. Como siempre, os he grabado la receta en vídeo para el canal de  YouTube, ¡corred a verla! No me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar. 

• 8-10 carrilleras de cerdo
• 400 ml de salsa de tomate (preferiblemente, que sea casera, os dejo aquí el enlace a la receta)
• 100 ml de vino blanco
• 2-3 dientes de ajo
• Una hoja de laurel
• Media cucharadira de comino en polvo
• Media cucharadita de hierbas provenzales
• Media cucharadita de curry
• Harina (2 cucharadas más o menos)
• Sal
• Pimienta
• Aceite de oliva

Lo primero que vamos hacer en la receta de hoy es salpimentar por ambos lados las carrilleras. Previamente, las habremos limpiado bien, quitando el exceso de grasa que puedan tener. Una vez salpimentadas, ponemos una sartén al fuego y añadimos tres cucharadas de aceite de oliva. Mientras el aceite se calienta, vamos a enharinar ligeramente nuestras carrilleras: no es necesario ni conveniente que tengan demasiada harina, simplemente las pasamos por ambos lados y después las sacudimos un poco para quitar el exceso.

Cuando el aceite haya cogido la temperatura, incorporamos las carrilleras a la sartén. Las mías eran pequeñas y me han cabido todas de una vez, pero si en vuestro caso es necesario, selladlas en dos tandas. Vamos a dorarlas un par de minutos por cada lado y después, echamos el vino blanco. Cocinamos durante medio minuto a fuego vivo y apagamos el fuego.

Pasamos con cuidado las carrilleras selladas y en el resto del vino blanco que quede en la sartén a la cubeta de la olla lenta. Incorporamos los dientes de ajo enteros (con piel y todo), la salsa de tomate, la hoja de laurel, el comino, las hierbas provenzales y el curry. Movemos todo con cuidado para que Hemos introducido en la olla lenta se mezclan. Tapamos la crockpot y cocinamos en lento (LOW) durante aproximadamente siete horas. Pasado ese tiempo, las carrilleras estarán tiernas y suaves. Las servimos acompañadas de unas patatas fritas, puré de patata o arroz cocido. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Si queréis hacer esta receta de manera tradicional no hay ningún problema: salpimentamos, enharinamos y sellamos las carrilleras en la cazuela donde vayamos a cocinarlas después (puede ser una cazuela normal o una olla a presión). Después incorporamos el vino blanco, la salsa de tomate, las especias y cocinamos hasta que estén tiernas. En la olla a presión necesitarán 20-30 minutos y en una cazuela normal una hora y media o dos.
• Si usáis una salsa de tomate comercial, es importante que sea de buena calidad y sabrosa, de ello dependerá el resultado final de estas carrilleras.
• No os cortéis y añadir a esta receta las especias que más os gusten. En este caso, aparte de las que yo pongo, irían muy bien poner un poco de pimentón (dulce o picante en función de vuestro gusto) y cualquier tipo de hierba aromática.

Ya sabéis que estoy enamorada de mi Crockpot, os lo digo siempre que os enseño una receta de cocción lenta. ¡No sé cómo podía vivir sin ella! La mía es de 3,5 litros y manual; para 3-4 personas tiene un tamaño ideal (aunque hay de muchísimos tamaños diferentes, os recomiendo que echéis un vistazo a las muchas opciones que hay y, si tenéis alguna duda, no os cortéis en preguntarme) y de precio está fenomenal. Desde luego, este es un aparato que se ha vuelto imprescindible para mí. ¡Ya veis qué recetas tan ricas se pueden hacer con ella!

El resultado son unas carrilleras de cerdo que quedan deliciosas: la carne se deshace y la salsa queda muy sabrosa con todas las especias que le ponemos. Si os animáis a prepararlas, mandadme una foto para que pueda ver lo ricas que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis la recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!