Albóndigas en salsa de verduras {CrockPot y tradicional}. Reto Alfabeto Salado

Estamos a día 1 y, como cada primero de mes, tenemos nuestra cita con el Reto Alfabeto Salado, reto culinario que tengo el placer de organizar mensualmente. Esta vez los ingredientes que debíamos combinar han sido escogidos por Lola y Elvira, de los blogs Mes Petits Accidents y Así se come en Granada, respectivamente, y no pueden gustarme más. Pavo y hierbas; hierbas y pavo: dos ingredientes que, por su amplitud, dan muchísimo juego y, además, son muy fácilmente combinables.

Tras pensarlo bastante (como os digo, son ingredientes que dan mucho juego y me ha costado un poco decidir qué cocinar), al final me he decantado por hacer albóndigas con carne de pavo y pollo. Como hierbas, he usado perejil y romero, aunque esta receta admite añadir un montón de hierbas aromáticas diferentes. Yo he cocinado las albóndigas en CrockPot u olla lenta, pero os explico también la elaboración de manera tradicional para que todos podáis prepararlas en casa. No me enrollo más: os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta:

• Tiempo de preparación: 30 minutos
• Tiempo de cocinado: en función de cómo las cocinemos 
• Tiempo total: en cazuela normal 1 hora; en olla lenta 2 horas y 45 minutos o 6 horas y 45 minutos
• Nivel de dificultad: medio
• Raciones: 4

Ingredientes:

• Medio kilo de carne picada (en este caso, mezcla de pavo y pollo)
• Un huevo
• Una rebanada de pan remojada en leche
• Una cebolla
• 3-4 zanahorias
• Una manzana
• 250 ml de cerveza (sustituible por vino blanco)
• 4 dientes de ajo
• Media cucharadita de comino en polvo
• Media cucharadita de cúrcuma en polvo
• Perejil
• Una ramita de romero (o media cucharadita de romero seco)
• Sal
• Pimienta
• Si las hacemos de manera tradicional, necesitaremos también un par de cucharadas de harina y aceite de oliva)

Lo primero que vamos hacer en la receta de hoy es formar las albóndigas. Para ello, colocamos la carne picada en un cuenco amplio y añadimos el huevo y el pan remojado en leche bien escurrido. Después, incorporamos dos de los cuatro dientes de ajo: vamos a añadirlos rallados o picados a cuchillo lo más finalmente posible. Echamos a continuación el perejil picado, media cucharadita de comino en polvo y sal y pimienta al gusto.

Mezclamos todos los ingredientes de las albóndigas hasta que se integren completamente. Yo lo hago con las manos: me parece la forma más cómoda y fácil, aunque si preferís hacerlo con una cuchara, adelante. Cuando la masa de las albóndigas esté lista, si tenemos tiempo la dejamos reposar en el frigo durante unas horas. Pero si no disponéis de tiempo (como era mi caso), no pasa nada, podéis formar las albóndigas directamente.

Para dar forma a las albóndigas, cogemos porciones de carne y formamos bolas de aproximadamente el tamaño de una bola de pin pon. Si veis que la carne se os pega demasiado las manos, humedecéroslas con un poquito de agua, es un truco infalible que no falla nunca. Repetimos este proceso hasta terminar con toda la carne. A mí en total me han salido 17 albóndigas.

Vamos ahora a cocinar las albóndigas. Vamos primero a ver cómo cocinarlas en olla de cocción lenta.  Ponemos en la cubeta de la olla lenta la cebolla, las zanahorias y la manzana, todo picado finamente. Añadimos también los dos dientes de ajo restantes, rallados o muy picaditos. Echamos media cucharadita de cúrcuma en polvo y salpimentamos al gusto. Movemos un poco para mezclar todo y formar en el fondo de la olla lenta una camita con las verduras. 

Sobre las verduras colocamos bien ordenaditas las albóndigas. Lo mejor de hacer albóndigas en CrockPot es que no es necesario sellarlas previamente en una sartén, podemos añadirlas directamente porque quedan perfectas. No os preocupéis si no os caben todas las albóndigas en una sola capa, podéis colocar unas sobre otras sin problema. Incorporamos la cerveza o el vino blanco (en mi caso es cerveza) y por último el romero, que puede ser fresco o seco, lo que tengáis en casa.

Tapamos la olla de cocción lenta y cocinamos 2 horas en alto (HIGH) o 6 horas en lento 8LOW): de ambas maneras las albóndigas quedan fenomenal, así que a vuestro gusto. Yo esta vez he optado por las 6 horas más lento.

En caso de querer cocinar estas albóndigas de manera tradicional, una vez tengamos las bolas de carne formadas, las pasamos por harina y las doramos en una sartén con un poco de aceite. En esa misma sartén rehogamos todas las verduras de la salsa durante unos minutos, hasta que estén pochadas y, a continuación, colocamos todos los ingredientes de estas albóndigas en una cazuela. Cocinamos con la tapa puesta durante 20 minutos aproximadamente a fuego suave.

Pasado el tiempo de cocinado correspondiente en cada caso, las albóndigas ya están listas. En este punto, tenemos dos opciones: servir las albóndigas con las verduras tal cual están, o batir las verduras con la batidora de mano para tener una salsa triturada, tal y como voy a hacer yo (es opcional, como os digo podéis dejarlas tal cual, pero en casa preferimos la salsa pasada por la batidora).

Para ello, retiramos la rama de romero y pasamos las albóndigas a un plato. Después, vamos a quitar un poco de la grasa que ha saltado la carne: solo hay que retirar con ayuda de una cuchara la parte superior del caldo de la cazuela. Esto es opcional pero no se tarda nada y así la salsa quedará más ligera. A continuación, con ayuda de la batidora trituramos las verduras hasta que tengamos una salsa bien fina.

Probamos la salsa por si es necesario rectificar de sal y volvemos a introducir las albóndigas. Dejamos 15 minutos más a fuego lento (LOW en caso de tratarse de olla lenta) para que se cocine todo junto un ratín y se integren aún más los sabores. Las servimos bien calientes acompañadas de patatas fritas, puré de patata, arroz cocido... ¡y mucho pan para mojar en la salsa!¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Yo he usado carne picada de pavo y pollo, pero podéis hacer esas albóndigas con la carne picada que queráis: vacuno, cerdo, mixta… Esas albóndigas quedarán perfectas igualmente.
• Yo uso pan de molde para las albóndigas, pero podéis sustituirlo por una rebanada de pan normal (puede ser pan del día anterior sin problema).
• Puede que os sorprenda el añadir manzana, pero os aseguro que aporta un sabor y una textura ideal a la salsa. ¡Os va a encantar!
• Esta receta, como la gran mayoría de platos cocinados a fuego lento, ganan de sabor de un día para otro, así que si podéis hacerla que víspera, perfecto.
• Tal y como os comento en la receta, triturar la verdura de la salsa es totalmente opcional. A nosotros nos gusta más pasadas por la batidora, pero si os da pereza hacerlo no os preocupéis: las albóndigas estaban deliciosas igualmente.

Estas albóndigas quedan súper jugosas y el sabor de la salsa es una auténtica delicia. Preparaos para mojar pan sin parar... Si os animáis a hacerla, mandadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda, me hace mucha ilusión que preparéis la recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. Hasta la próxima receta