Crema de coliflor

No sé cómo estaréis por la zona por donde vivís, pero aquí en Bilbao llevamos ya unos días con el clima bastante fresquito. Ha sido dar la bienvenida a septiembre y llegar días bastante plofs... Y es que, aunque parezca mentira, ya tenemos aquí mismo el otoño. ¡Tengo la sensación de que el verano ha volado! ¿Os pasa lo mismo? Y con la llegada del otoño y del frío llega también la temporada de disfrutar a tope de cremas y sopas calentitas y reconfortantes, de esos platos que al llegar a casa un día de lluvia sientan de maravilla. ¡A mí me encantan!

De hecho, mil veces os he dicho que prácticamente a diario, bien sea para comer o para cenar, siempre tomamos alguna crema o puré. Y es que lo bueno que tienen este tipo de elaboraciones es que son sanas, no dan nada de trabajo, se pueden preparar con antelación y tenerlas listas en el frigo para calentar y servir y son súper versátiles. ¡Qué más se puede pedir! La crema que os traigo hoy es de coliflor y en casa nos rechifla. Queda suave, ligera y con un sabor delicioso, ya veréis. No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta

• Tiempo de preparación: 5 minutos
• Tiempo de cocinado: 25 minutos
• Tiempo total de elaboración: 30 minutos
• Nivel de dificultad: bajo
• Raciones: 4

Ingredientes

• Medio kilo de coliflor (fresca o congelada)
• Una cebolla
• Una patata 
• Dos vasos de caldo de pollo o verduras (o agua)
• Dos cucharadas de queso philadelphia 
• Sal
• Pimienta 
• Tres cucharadas de aceite de oliva extra virgen coosur (y un poco más para poner por encima a la hora de servir)
• Huevo cocido (opcional)

Ponemos en una cazuela el aceite y cuando esté caliente añadimos la cebolla picada en trozos no excesivamente pequeños. La sofreímos dos o tres minutos a fuego vivo hasta que veamos que se dora un poquitín y echamos la coliflor y la patata troceados. Añadimos sal y pimienta y rehogamos dos minutos.

Añadimos el caldo (justo justo hasta cubrir las verduras, tened en cuenta que la coliflor suelta mucha agua) y tapamos la cazuela. Dejamos a fuego medio unos veinte minutos, hasta que las verduras estén blanditas. Para comprobar que estén, podéis pincharlas con un cuchillo: si no ofrecen resistencia, están listas.

Retiramos del fuego y añadimos el queso crema y, a continuación, trituramos con la batidora hasta que nos quede una crema fíen fina y suave. Rectificamos de sal y pimienta si es necesario y servimos bien calentita con unas gotitas de aceite en crudo por encima. Yo la he acompañado de un poco de huevo cocido, que combina muy bien, y unas almendras laminadas para darle un toque crunchy. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Si os gustan las sopas espesas, os recomiendo que retiréis un cazo del líquido de cocción antes de triturar la crema. Como os decía, la coliflor suelta muchísima agua y aunque añadamos poco caldo puede ser que nos quede una crema ligera, así que lo mejor es que retiréis un poco del caldo de cocción, trituréis y si os ha quedado una crema excesivamente espesa añadáis algo de líquido a posteriori. 
• Podéis sustituir el philadelphia por dos o tres quesitos o incluso algún queso azul. Otra idea es añadir un chorrito de nata o de leche evaporada. 
• El toque crunchy en las cremas para mí es muy importante. Yo he puesto almendritas, pero podéis poner cualquier fruto seco picadito, unos picatostes, semillas... ¡Imaginación al poder!
• Podéis conservar durante varios días esta crema en el frigo sin problema. Si queréis, otra opción es congelarla, aunque al llevar patata, una vez descongelada, necesitaréis darle una pasada con la batidora para que la textura quede perfecta.

Os aseguro que esta crema queda deliciosa a más no poder. Suave, ligera y con un sabor riquísimo; además de ser una manera original y diferente de comer coliflor. Si os animáis a hacerla, mandadme una foto para que pueda ver lo rica que os queda, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!