Natillas de fresa

Hace ya unas semanitas que las fresas han comenzado a llegar a las fruterías, y para mí es sinónimo de la primavera. Y creo que no me equivoco al decir que las fresas es de la fruta que más gusta, en general, a todo el mundo. A mí me rechiflan, y en cuento comienza la temporada no paro de hacer postres con ellas. Y hoy llego con un POSTRAZO, así en mayúsculas directamente: unas natillas de fresas que quedan de auténtico lujo. Un sabor riquísimo, delicadas, ligeras, muy suaves… 

Creedme, son realmente irresistibles. Y lo mejor de todo es que se hacen en 10 minutines, sin ningún esfuerzo. ¡Un postre ideal para el veranito! Como siempre, os he grabado la receta para el canal de YouTube, ¡corred a verla! No me enrollo más, os digo los ingredientes y nos ponemos a cocinar.

Ficha de receta

• Tiempo de preparación: 5 minutos
• Tiempo de cocinado: 8 minutos
• Tiempo total de elaboración: 13 minutos
• Nivel de dificultad: bajo, si tienes manos puedes hacerlo sin problema.
• Raciones: 5

Ingredientes

• 550 ml de leche
• 300 gramos de fresas
• 130 gramos de azúcar
• 3 yemas de huevo
• 20 gramos de maicena

Lo primero que vamos a hacer en la receta de hoy es lavar y secar muy bien las fresas. Después, les cortamos el rabito, las troceamos y las colocamos en el vaso de la batidora. Añadimos una parte de la leche (la mitad o así, a ojo) y batimos todo con la batidora de mano durante un minuto y medio o dos, hasta que las fresas queden totalmente trituradas. A continuación, colaremos la mezcla (si preferís no hacerlo no pasa nada, pero no se tarda nada y eso hará que nos queden unas natillas con una textura súper fina) y la juntamos con el resto de la leche. Reservamos.

Ponemos ahora en una cazuela las yemas y el azúcar y mezclamos con las varillas de mano. Incorporamos la maicena y volvemos a batir. Después, incorporamos la leche con las fresas trituradas, en un par de veces o tres, y mezclamos con las varillas hasta que no queden grumos. 

Llevamos la cazuela al fuego y cocinamos a fuego medio, moviendo con las varillas, hasta que la mezcla espese. No os paséis de cocinado, tened en cuenta que  una vez enfrían espesan, y las natillas han de quedar ligeritas.

Repartimos en los vasos o cuencos donde vayamos a servirlas y las dejamos un rato a temperatura ambiente hasta que se enfríen. Después, las metemos en el frigo para que están muy fresquitas a la hora de comer. ¡Que aproveche!

Algunos consejos:

• Esta receta es ideal para aprovechar fresas maduras o que se nos estén quedando blandurrias en el frigo, ya que son más dulces y sabrosas.
• Yo uso leche entera, pero podéis usar la leche o bebida vegetal que toméis normalmente en casa. ¡Estas natillas quedarán igual de ricas!
• Yo las he servido con media fresa encima, para dar un toque de calor, pero no os cortéis: podéis poner chocolate, crocanti de almendra, alguna otra fruta fresca… 

Estas natillas quedan increíbles de buenas, creedme. ¡Si las probáis, repetiréis seguro! Si os animáis a hacerlas, mandadme una foto para que pueda ver lo ricas que os quedan, me hace mucha ilusión que preparéis las recetas del blog. Por último, os recuerdo que podéis seguir el blog en Facebook, Twitter, Instagram y YouTube, tenéis los enlaces justo aquí mismo a la derecha. ¡Hasta la próxima receta!